CELAC SI, CELAC NO


 
Fue sumamente acertado ambientar el nacimiento de CELAC en los 200 años de la Independencia de Venezuela. No meramente declarativa o discursiva, sino que la ciudad de Caracas se vistió con motivos alusivos. Pensamientos, postales, prensa, radio y TV colores. La inspiración del Libertador Simon Bolívar resurgió potente en el país, en una oportunidad aprovechada muy bien para reforzar la identidad nacional y americana.
La mayoría de los jefes de estado asistentes fue contagiada por el hecho, de sus labios surgieron los nombres de Simón Bolívar y Antonio de José de Sucre, y en ocasiones alusión a otros libertadores de America. Las instrucciones dadas por el Libertador en 1824 y 25 esta vez si parecieron llegar.
Fue además una forma muy sublime de decirle al mundo que aquí en America (que incluye al Caribe íntegramente) tenemos siglos buscando la forma de integrarnos porque nos hemos reconocido como parte de una gran entidad, que aunque con nombre impuesto, tiene una vocación originaria.
Esta idea no puede dejarse ir. Muchas veces los técnicos y políticos piensan que es solo romanticismo acudir a la memoria de los padres fundadores y en su documento obvian esas premisas espirituales que son motores para el movimiento popular.
Ahora bien, no es un secreto que para ello, a los funcionarios (altos, muy altos, en cualquiera de los cargos), hay que imponerlos de esa historia gloriosa de Nuestra Abya Yala, para que actúen de verdad movido por el espíritu del significado de la Independencia para Siempre.
@bolivarreinaldo

Comentarios

  1. Excelente relación, y viva cuenta de este tiempo de refundación de la Patria Grande. Gracias Profesor Bolívar.

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  2. Abya Yala. Nuestra tierra, en lengua de los kunas, pueblo originario de Panama

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